Préstamos de China a otros países sí incluyen condiciones especiales de acuerdo a nuevo reporte
Los contratos de préstamos chinos en el extranjero tienden a incluir "cláusulas de confidencialidad inusualmente amplias", y requieren un reembolso prioritario a sus prestamistas según establece un reciente estudio. Las condiciones impuestas a estos créditos estarían complicando negociaciones internacionales de deuda en medio de la pandemia.
Durante varios años, en particular en sus gestiones diplomáticas con países en desarrollo de África y otras regiones, Beijing declaró tener un enfoque “sin condiciones” al ofrecer préstamos a otros gobiernos. Muchos países aceptaron con entusiasmo esos fondos con la promesa de que China construiría infraestructura con rapidez (lo que hizo) sin requerir cambios en la gobernanza o tediosos requisitos de presentación de informes, a diferencia de la mayoría de los préstamos de Estados Unidos, Europa y algunas instituciones multilaterales.
- Entre 2013 y 2016, por ejemplo, el Banco de Desarrollo de China y el Banco de Exportación e Importación de China prestaron más dinero que el Banco Mundial.
- Ese flujo de crédito ha disminuido en los últimos años, según han indicado varios estudios, ya que el riesgo de endeudamiento se ha acumulado y China ha encaminado su modelo de desarrollo económico hacia su consumo interno.
- Algunos observadores, en particular políticos estadounidenses, acusaron a China de “diplomacia de la trampa de la deuda“, ya que algunas inversiones en el extranjero tuvieron problemas y Beijing intervino cobró las garantías, sobre todo en Sri Lanka. Aún así, muchos académicos consideran que los temores de explotación de China son infundados, incluyendo el caso de Sri Lanka.
Sin embargo, si habrían condiciones vinculadas a préstamos chinos en el exterior. De acuerdo a un nuevo estudio descrito como el “primer análisis sistemático de los términos legales de los préstamos extranjeros de China”, realizado por el laboratorio de investigación AidData en William & Mary, el Centro para el Desarrollo Global, el Instituto de Kiel para la Economía Mundial y el Instituto Peterson de Economía Internacional, concluyeron que:
- “Los contratos de China contienen cláusulas de confidencialidad inusualmente amplias, que impiden a los prestatarios revelar los términos o, en ocasiones, incluso la existencia de los préstamos”.
- Los contratos de préstamos chinos a menudo “posicionan a los bancos estatales chinos como principales acreedores cuyos préstamos deben reembolsarse de forma prioritaria”.
- “Los contratos de China también le dan una amplia libertad para cancelar préstamos o acelerar el reembolso si no está de acuerdo con las políticas del prestatario”.
El estudio, realizado durante un período de 36 meses, recopiló 100 contratos chinos a 24 países en un conjunto de datos, y los comparó con 142 contratos de otros prestamistas importantes. Si bien los 100 contratos son apenas una fracción de los 2000 o más que se estima se han firmado en las últimas décadas, los autores escriben que su muestra es “lo suficientemente grande como para dejar en claro que las entidades chinas usan contratos estandarizados y para identificar un puñado de formularios de contratos predominantes”.
¿Qué otras implicaciones?
- Complicaciones para la reestructuración de la deuda internacional: “Cerca de las tres cuartas partes de los contratos contienen lo que el informe denomina cláusulas ‘no Club de París’, que comprometen expresamente al prestatario a excluir la deuda de la reestructuración por parte de acreedores bilaterales oficiales del Club de París“, según informó el Financial Times, señalando que algunos tenedores de bonos ligados a la actual crisis financiera de Zambia ya se habían “resistido a una reducción en sus pagos de intereses, porque sospechaban que los ahorros se utilizarían para pagar las deudas chinas del país”.
- Posible contradicción con los compromisos del G20: Scott Morris, coautor del informe, dijo a Reuters que si bien China podría simplemente no hacer cumplir las cláusulas de reembolso de la base de prioridad si llegara el momento, tal arreglo en la práctica contradeciría el acuerdo de China con las principales economías del G20 sobre un “marco común” para el alivio de la deuda de las naciones más pobres durante la pandemia del COVID-19.
- Diluyendo las líneas entre deuda estatal y comercial: Deutsche Welle señaló que los préstamos de China parecen diferir “en el uso de disposiciones únicas que, aunque tal vez sean estándar en relación a deuda comercial, adquieren una mayor importancia cuando se trata de préstamos entre gobiernos”.
Otras notas en relación a este tema:
- Economista Michael Pettis en Twitter: “En las primeras etapas de los préstamos, cuando las condiciones subyacentes eran buenas y los precios de materias primas subían, los inversores chinos, como todos sus predecesores, pensaron que habían descubierto una nueva y mejor manera de invertir en países más riesgosos… Pero en algún momento, en este caso sospecho que sucedió con Venezuela alrededor de 2014-15, de repente descubrieron lo que todos los demás ya sabían sobre la dificultad de financiar proyectos de desarrollo”.
- Jefe de la ONU advierte sobre próxima crisis de deuda para el mundo en desarrollo / FT (muro de pago)
António Guterres, secretario general de la ONU: “La respuesta al COVID y a los aspectos financieros [de la crisis] se ha fragmentado, y las divisiones geopolíticas no están ayudando… Ha sido demasiado limitada en alcance y demasiado tardía”. - Nuevo informe sobre préstamos chinos a África no “cuenta toda la historia”, dice un conocido analista chino / Proyecto China-África (muro de pago).
- China quiere convertirse en un actor importante en ayuda internacional / China en África Podcast a través de The China Project.
Artículo original escrito por Lucas Niewenhuis / 1 de abril, 2021.