No Es El Fin De Hong Kong, Pero Una Transformación: Entrevista Con Economista Alicia García Herrero

Alicia García Herrero es la economista jefe para Asia-Pacífico del banco de inversión francés Natixis, y profesora adjunta en la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong. Anteriormente trabajó como economista en el Fondo Monetario Internacional (FMI).  

The China Project le consultó sobre el discurso que Donald Trump dio el pasado 29 de mayo, en que el mandatario estadounidense apuntó sus dardos nuevamente a China. 

En su discurso, Trump anunció que está tomando medidas para revocar el estado especial de Hong Kong. Esto ocurrió luego de la aprobación por parte de Beijing de la ley de seguridad nacional para esa ciudad. ¿Cómo afectarán estas decisiones a la economía de Hong Kong?

En realidad Hong Kong es miembro de la OMC y la OCDE, independiente de China, por lo que Estados Unidos no puede decidir unilateralmente que este ya no sea el caso. Sin embargo, Estados Unidos pueden tratar a Hong Kong como parte de China continental en cualquier tema comercial o de IED [Inversión Extranjera Directa].

Estados Unidos podría decidir imponer los mismos aranceles de importación que impuso a China continental durante la guerra comercial. En esa misma línea, cualquier IED que vaya de Hong Kong hacia Estados Unidos podría ser tratada como originada en la parte continental por las autoridades estadounidenses, lo que ya está muy cerca de ser el caso, luego de la reforma al Comité de Inversión Extranjera en Estados Unidos. El estatus especial de Hong Kong también le otorga a la ciudad un estatus menos exigente en la prohibición de exportaciones de tecnología sensible, el cual Hong Kong perdería.

No hay duda de que todas estas noticias son negativas para Hong Kong, y más aún si otros países siguen el ejemplo de Estados Unidos. En  cuanto a la IED saliente desde Hong Kong, se han registrado casos recientes en Israel y Australia en que firmas de Hong Kong han sido tratadas como empresas de China continental en términos de restricciones de inversión.

Si se revoca el estatus especial de Hong Kong, ¿cómo podría esto afectar al comercio y la economía en general en China y en toda la región del Asia-Pacífico?

Dado que el 70% de la IED externa e interna del continente pasa por Hong Kong, una revocación de su estatus especial afectaría la forma en que China invierte en el extranjero y cómo las empresas extranjeras invierten en la parte continental.

China podría comenzar a invertir directamente en todo el mundo o recibir inversiones directamente, pero eso es más fácil decirlo que hacerlo. Para la IED saliente, China se beneficia del estado de derecho y tribunales internacionales de Hong Kong, que otorgan credibilidad a las ofertas de inversión de sus empresas.

Más importante es que China se beneficia de un fácil acceso en Hong Kong a financiamiento externo en US$. Esto es cierto para los bonos financieros en US$, con empresas de China continental representando más del 70% del monto total de la emisión de bonos en US$ en Hong Kong. También es cierto para el patrimonio financiero, como se queda en evidencia a través de las IPO (Oferta Pública Inicial) y las aperturas secundarias a la bolsa de compañías Chinas en el mercado de valores de Hong Kong.

Hong Kong ha jugado un papel crucial como la puerta entre China y Occidente. ¿La revocación del estatus especial de Hong Kong eliminaría el rol de la ciudad como mediador, o los lazos de Hong Kong con otras partes del mundo mantienen su fortaleza como centro financiero?

Parece claro que el papel de Hong Kong como intermediador, también lo llamaría una “fortaleza de arbitraje” en muchos sentidos, entre China y Occidente está en juego, pero Hong Kong podría conservar su papel como offshore dentro de Asia. Este no es realmente el fin de Hong Kong, pero una transformación de su rol de larga data.

Ha vivido en Hong Kong durante muchos años. ¿Cómo describirías el estado de ánimo actual de las comunidades comerciales y financieras en medio de las crecientes tensiones entre Washington y Beijing?

He vivido en Hong Kong por casi 14 años. Hong Kong es claramente una víctima de las tensiones chino-estadounidenses. La ciudad es parte de China, y como tal, le es difícil mantener una amplia independencia económica en un ambiente de guerra fría. Lo que estamos viviendo era de esperarse.

Artículo original escrito por Shannon Van Sant / 3 de junio, 2020